SOMOS NATURALEZA. VALLE DE TENA

Día 1

Por fin llega ese momento en que pisas un prado, tus ojos ven la inmensidad del cielo azul y las montañas del Pirineo, respiras y ya comienzas a reconectar con tu cuerpo, a recorrer esos espacios internos que habías olvidado que eran parte de ti.

Una vez instalados en el alojamiento dedicaremos el día a buscar nuestra raíz, esa parte que te fundamenta, de dónde partes en este encuentro con prácticas de indagación de la mano de Noemi Folch Pueyo, que será la guía de este viaje.

En este momento no importa tanto tu nombre, como conocer tus pasiones, tus sueños, alegrías o la experiencia que acaba de comenzar. Sentirnos desde ya, acompañados y parte de este encuentro, desde esa primera mirada. Se ha demostrado que la inmersión en la naturaleza alejado de la tecnología, durante 4 días incrementa la creatividad y la resolución de problemas, ¿te animas a probar este reto?

Por la noche, compartiremos ese primer momento de conectar con los demás, queremos que se cree un bosque, un círculo de conexión y soporte entre todos los participantes, y para ello, recurriremos a herramientas que nos nutran, dinámicas de comunicación, humor o expresión corporal. Es un momento de disfrute, de comenzar a fluir, a dejarte ser, y compartir lo que eres con el otro. Crear un lugar donde compartir desde la escucha activa, la empatía y el corazón.

Día 2

Una vez que hayas recargado pilas en nuestras espectaculares cabañas y hayas despertado tus sentidos con la belleza del entorno, realizaremos unos ejercicios conscientes, para crear un hábito de consciencia corporal matutina, dar espacio a esa conexión corporal, y gestionar mejor nuestros pensamientos.

Nos apetece mucho explorar cómo es nuestro entorno, por lo que disfrutaremos de la visita guiada de Planeta40, a un pueblo abandonado de la zona. En Somos Naturaleza entendemos la gran conexión que existe entre la naturaleza, la actividad del ser humano y su supervivencia. ¿Te has planteado alguna vez cómo sería el Pirineo si no pastaran las vacas? ¿O cómo han vivido las personas ese contacto con el ciclo vital natural?
Queremos ofrecerte una actividad donde se despierte ese interés por la naturaleza sintiendo que nosotros somos parte de ella y la transformamos con nuestras decisiones.

Por la tarde daremos salida a nuestra expresión artística, en nuestra vida cotidiana transitamos por emociones complejas, en este taller crearemos nuestro refugio emocional interno y lo representaremos de forma plástica. Conectando nuestro sentir con nuestra expresión, dejando atrás juicios, resultados o perfeccionismo, la creatividad implica estar en el momento presente.

Por la noche, finalizaremos la jornada con una actividad nocturna en la que nos dejaremos llevar por la visualización creativa, para despertar en tu interior la fuerza interna natural. En las civilizaciones anteriores a la nuestra realizaban prácticas para elegir un animal, que se asemejara a sus destrezas o dones. ¿En qué destacas tú? ¿Ves cómo un águila?, ¿Corres como un lince?. Los animales nos recuerdan las capacidades que tenemos los seres humanos que en ocasiones nos cuesta tanto mostrar.

Día 3

¿Ya te has acostumbrado a despertarte rodeado de bosque?. Edward Wilson menciona que el ser humano se siente atraído por los espacios naturales, sus elementos y los procesos que suceden en estos entornos, lo llama biofilia. Nos encantaría contagiarte de esta sensación, que comiences a sentir esa atracción hacia los prados y montañas del Pirineo, y recuerdes este lugar como parte de ti. Hoy nos desperezaremos con los movimientos de consciencia corporal, para recibir a continuación, la experiencia de “Danzaterapia” que nos facilitará Belén Capapé de la Escuela de Danza Integral, que como imaginarás nos ayudará a encontrar en el movimiento nuestra esencia natural.

No te preocupes, que después de tanta agitación, llegará la calma, dispondrás de un momento de descanso, que se acompañará de la visita a un restaurante de la zona, en el que disfrutemos de la gastronomía local.

Por la tarde, estiraremos las piernas con una excursión a pie con salida desde el mismo alojamiento. Desarrollaremos nuestra capacidad de adaptación al entorno, cómo es un baño de bosque, y favorecer un espacio sin objetivo, solamente ser. ¿Sabes que las plantas, especialmente los árboles se comunican entre ellos?. Peter Wohlleben asegura que los árboles sienten emociones, tienen memoria y  cuidan de sus descendientes. Incluso, mediante su investigación, explica cómo los árboles forman un bosque en el que impera la cooperación y solidaridad.

Por la noche, cuando llegue la oscuridad, te retamos a pasear por los alrededores de Piedrafita Mountain, descubriendo esos miedos, bloqueos, o dificultades que aparecen en este paseo tan especial. Queremos que en esta aventura en el Pirineo te permita reconectar con la naturaleza, disfrutar de la diversidad de experiencias que nos ofrece, descubrir lo que puedes ofrecerte a ti mismo, aceptarte y amarte por quién eres y qué eres en este instante. Ser tú mismo o tú misma.

Día 4

Cada día es un reto en este viaje, y en el día de hoy, te proponemos superarte un poco más, nos desplazaremos al Ibón de Piedrafita a los pies de la cara norte del Pico Telera. Como dice Thich Nahth Hanh, el milagro no es caminar sobre el agua, el milagro es caminar sobre la tierra en el presente, para apreciar la belleza y de la paz que se dispone. Esta experiencia no exige gran capacidad física, sino, más bien, centrar la atención a cada paso, explorar el silencio, y comprender cada momento con la naturaleza como una oportunidad de volver a casa. Como imaginarás, lo importante es disfrutar del camino, puesto que éste es más importante que la propia meta. Eso sí, cuando lleguemos al ibón creeréis haber llegado a un paraíso.

Cuando finalicemos esta excursión, te dejaremos a tu aire para conocer un restaurante de la zona que te apetezca, puedas acudir a algún pueblo que te haya llamado la atención, y conectes con tu intuición, visitando ese lugar que sientes la necesidad de conocer.

Por la tarde, nos visitará María Guasch, fisioterapeuta, acupuntora y profesora de qi gong y taichí. Profesora y directora de la Escuela del Sistema ARC y Codirectora de Caballo de Viento. María compartirá con nosotros su rompedora propuesta de conexión con la naturaleza QI GONG, la gimnasia de la salud y la longevidad.

El Qi gong es una disciplina física, energética y mental, con la cual se toma conciencia de la conexión con la energía de la naturaleza, y que desarrolla una sensibilidad que nos permite ser consciente de nuestra salud, de prevenir o curar enfermedades tan solo restableciendo el flujo de la energía. La atención a la postura  y a la respiración y el movimiento lento, propician que la mente se calme y recupere su ritmo natural mejorando las capacidades mentales: la concentración, la memoria, la creatividad y la fuerza interior. Con el Qi gong podemos eliminar el estrés, aumentar la vitalidad, sentirnos más plenos y serenos, recuperando la ilusión de vivir.

Como dicen ellos “El objetivo principal es ser consciente de que nos nutrimos de la energía de la tierra (yin) y del cielo(yang), que la respiración es muy importante para recargarnos de Qi y que el trabajo excesivo o los esfuerzos nos desgastan la energía vital.”

Por la noche, tendremos una sorpresa, que no te desvelaremos ;), después compartiremos un momento de gratitud, búsqueda de fortalezas, y meditación donde descubrir la belleza de todos los componentes de esta aventura. “Todas tus acciones son semillas que tarde o temprano darán su fruto. Es momento de conectar con la energía de la gratitud, de ser conscientes de lo que ha supuesto esta experiencia y llevarlo a la acción, ¿qué energías voy a nutrir para que estos momentos se conviertan en semillas? ¿Qué frutos quiero recoger en mi vida cotidiana?

Día 5

Este es un día donde los sentimientos se entremezclan, el evento finaliza, y nos apetece que continúe. Nos reuniremos para crear un “Mandala” físico con elementos de la naturaleza, y compondremos uno interno, con todos los componentes de esta tribu. Quizá se hayan despertado esas neuronas espejo, sintonizando con tu “bosque”, reflejado en la cara de cada participante una gran ilusión por todo lo conseguido, y una ligera tristeza por su finalización. Las plantas vibran, las personas vibran, y en este último día, a lo mejor se ha creado una vibración única de esta tribu y la naturaleza que le rodea. Esperamos que ese día te lleves un gran recuerdo, y perdure en ti esa pasión por la naturaleza que sentimos nosotros, que nos invita a indagar en quién somos, y a ir más allá de creencias o pensamientos rutinarios. Nos vemos en este camino donde cada paso nos acerca más a esa paz con uno mismo, con el presente y el medio que habitamos.